Friday, September 02, 2005

Provocación al alcance de la mano

Para escribir necesito que me provoquen, que tristemente fácil me resulta, sólo es cuestión de apoyar un pie, tan solo uno en la vereda, abrir los ojos y la provocación está allí. Ni se necesita extender las manos. Los ojos tristes, las cabezas gachas, las bolsas que se abren y se cierran en busca de alimento, antes eran bolsas de basura, ahora son bolsas de alimento. En las verdes va el cartón, por qué abren las negras? Imbécil, el cartón no se come (todavía)!! Dos pasos, tres insultos, cuatro pasos, mil insultos. Gente contra gente, caras con odio, miradas de hielo, pies fríos que transportan cuerpos fríos que disimulan su miedo. La guerra del cerdo es un cuento para niños hoy en día. Hoy el cerdo nos está comiendo, con furia, vieron un jabalí alimentándose? Somos el alimento disponible, cuanto falta para que nos cosechen? La ficción de Matrix es que las máquinas se alimentaban de la sangre de los humanos, la realidad es que los mismos humanos (?) se alimentan de la sangre de otros humanos. Pero no como los caníbales, para comerlos, hasta podría llegar a entenderlos, nos chupan la sangre, nos exprimen y después nos entregan a los carroñeros para que terminen la obra. No se alimentan de nuestra carne por necesidad de proteínas, se alimentan de nuestro sudor, engordan con nuestro trabajo, se inyectan nuestros pensamientos y nuestras ideas, y luego cuando ya no somos mas útiles pasamos a formar parte del abono de sus tierras, el mas rico estiércol, para cosechar sus riquezas.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home